sábado, 21 de marzo de 2009

7.00 am


Acariciaba suavemente mi espalda. La luz se filtraba por las rendijas de las ventanas. Yo miraba sus labios, su nariz, su barbilla, y cerraba los ojos al ver que no era otro día más. Sólo oía su respiración y la mía, el latir de su corazón, y de fondo, la ignorada caja tonta. Podría definir cada mínimo detalle, cada remolino de su pelo, cada palabra y cada gesto, pero llamadme egoísta, simplemente no quiero compartir su magia con nadie más.
En ese momento aprendí a olvidar lo pasado, a recordar lo presente, aprendí que no estaba buscando nada más que eso, nada más que alguien con quien compartir mis silencios, alguien a quien dedicarle mis palabras, alguien que me quitara las ganas de irme, las ganas de dormir, las ganas de gritar, las ganas de llorar, la angustia de mi pequeño corazón.
Solo una mirada más, un beso más, una caricia más...
-Te quiero.

1 comentario:

  1. WoWWWWW!!!!!! ya se porque decias que no podias expresar esto en palabras.... ummmmm!!!! me he excitado... si!!! noto un bulto... lo has conseguido!!! jejeje me ha gustado muxo, repetiremos lo de este finde... y a la caja tonta que le den!!! coñeee!!!!un beso cabeza loca!!

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