sábado, 24 de abril de 2010

...y abrí los ojos con el miedo de que fuera un sueño, pero la luz se colaba entre las rendijas, demostrándome que eso no era verdad.
Y sentí su respiración en el pelo durante horas.
Y su mano en mi espalda,
y su piel contra la mía.

Y quise agarrar ese momento y no soltarlo,
y lo hice.

1 comentario:

  1. Un aficionado a tus escritos27 de abril de 2010, 4:38

    agárralo y no lo sueltes, yo tuve la oportunidad de agarrar algo así y no la aproveché. No cometas tú la misma estupidez.

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